(371 palabras) El tema del conflicto generacional, la confrontación entre "padres" e "hijos" es quizás uno de los problemas más comunes en toda la literatura mundial. La historia está en constante movimiento, junto con ella la sociedad humana se ve obligada a cambiar. Todo esto da lugar a malentendidos y conflictos entre generaciones que viven en la misma era, pero en mundos diferentes. Muchos grandes escritores han tocado este tema, sacando muchas conclusiones diferentes. Creo que la confrontación entre padres e hijos es inevitable, ya que la diferencia en su visión del mundo siempre se sentirá. Para probar esto, daré ejemplos.
Maxim Gorki en su obra "Petty Bourgeois" mostró el espíritu de toda una era en el conflicto doméstico de la familia Bessemyonov. Primero, en la persona del jefe de la familia Vasily Bessemenov, el viejo mundo aparece ante nosotros. Limitado, grosero, cerrado a todo lo nuevo, Vasily Vasiliev está tratando de controlar sin ceremonias no solo a sus hijos desesperados y no establecidos, sino también al joven ingeniero Neal. Al final, el Nilo se rebela contra el hombre que lo crió y abandona para siempre el mundo de Bessemyonov para construir el suyo. El trabajo de Gorki está muy relacionado con la realidad prerrevolucionaria que lo rodea, por lo que declara resueltamente la imposibilidad de la coexistencia de lo viejo y lo nuevo. Los "padres" deben irse para siempre, dejando el futuro a los "niños".
"Padres e hijos" de I. S. Turgenev ha sido durante mucho tiempo un ejemplo de libro de texto del conflicto entre lo viejo y lo nuevo. A primera vista, las ideas del autor no difieren de las opiniones de Gorki. El nihilista Evgeny Bazarov entra en un conflicto ideológico con el liberal Pavel Kirsanov, y luego lo encuentra por completo en un duelo. Ward Bazarova-Arkady Kirsanov comienza a avergonzarse de su propio padre y se aleja de él. Sin embargo, hacia el final de la narración, la situación está cambiando fundamentalmente: Eugene muestra al lector un amor por sus padres irremediablemente anticuados, se reconcilia con el viejo Kirsanov, y Arkady restablece las relaciones con su padre y se casa. En el conflicto de "padres e hijos", el escritor solo ve disputas insignificantes y sin sentido que no cuestan nada en la vida real. A diferencia de muchos autores, Turgenev desacredita la lucha de generaciones, instando a las personas a dar su consentimiento. Sin embargo, no niega que la confrontación sea inevitable, ya que muestra la gravedad del conflicto de opiniones, visiones del mundo, ideas que no pueden conciliarse.
El conflicto de generaciones ha sido y será relevante a lo largo de la historia humana. El pasado nos muestra que las personas pueden encontrar una comprensión mutua, pero los paradigmas de su pensamiento no convergerán de todos modos, porque son fundamentalmente diferentes entre sí. No se pueden reconciliar ni igualar; en cualquier caso, dejarán un espacio para disputas en las relaciones de generaciones.